Understanding Maghrebi Societies

En los últimos dos años muchos subsaharianos han salido de Argelia hacia Europa. Los nuevos carecen de una red comunitaria para hacer frente a las dificultades

Argel, periferia oeste.

Luc, un camerunés, ha hecho hueco en su casa. Una prima de su pareja tiene que llegar a lo largo del día, con su hijo de 10 años. “Tiene familia en Francia que pasó el año anterior”, explica el joven.

Un adolescente, sentado en el borde de un colchón, mira en su teléfono móvil vídeos de las manifestaciones en el Camerún anglófono. “Yo he venido para cruzar el mar”, dice. ”Allí será mejor para mí, el colegio es mejor”. Su padre, establecido en Europa desde hace un año, después de haber pasado varios en Argelia, pagó el viaje para que saliese de Duala. El chaval llegó solo, hace seis meses. Tenía que seguir la ruta de Libia, pero los combates en Sabratha suspendieron las salidas. Luc lo resume así: “Los veteranos se han ido. Y llegan jovencitos. Como ya no se pueden ir, esperan aquí”.

Argel, periferia sur.

Unos colchones cubren el suelo de las aceras de una serie de inmuebles en construcción. Un grupo de jóvenes se tiñe el pelo. Vienen de Guinea Conakry.

“Llegué hace tres meses”, explica el primero. Hoy ninguno de ellos ha encontrado trabajo, por eso esperan. “No sabía que sería difícil trabajar en Argelia”, comenta Mohamed, que afirma tener 17 años. Cada mañana, hay decenas de personas como él apostadas en la carretera, aguardando a que un particular venga a ofrecerles un trabajo por días.

Pero sin una red comunitaria y sin saber ni una palabra de árabe, estos inmigrantes se encuentran en una situación más precaria que la de sus predecesores.

Mohamed y sus amigos duermen en la calle. “¿Hay asociaciones que puedan ayudarnos?”, pregunta uno de ellos. “¿Sabe cómo puedo volver a mi casa? Estoy cansado”, añade otro. “Cada vez hay más guineanos en Argel”, explica Kader, un marfileño instalado en Argelia desde hace seis años. “No conocen el país y reaccionan muy mal en cuanto un argelino les habla mal o les insulta. Eso acaba en una pelea y hay heridos”.

Para seguir leyendo: https://elpais.com/internacional/2017/10/23/actualidad/1508753895_990438.html

Leave a Reply

Your email address will not be published.